Grandes Villanos - Dr. Christian Szell



Is it safe?


Durante la Segunda Guerra Mundial estuvo a cargo del campo de concentración Auschwitz II, donde se le conocía como el “Ángel Blanco”. Lo conocemos en su mansión en Paraguay, rodeado de recuerdos de la guerra. Escapo del castigo por sus crímenes acompañado de su hermano, a mediados de la década de los 40´s. Desde que observa el paisaje desde su mansión, sabemos que esta preocupado, inquieto, desesperado. Algo ha salido mal, no sabemos aún el motivo.

Dentista de profesión, el Dr. Szell realizó varios de los más viles experimentos con judíos, los cuales implicaba la tortura mediante sus instrumentos de trabajo. Ambicioso, cambia de giro hacia los diamantes. Extraerle los dientes a los cadáveres antes de deshacerse de ellos le creo una fama temible, a la que algunos cuantos le sobreviven.

Al inicio de esta historia, conocemos el destino de su hermano. Deteniendo el tránsito en una calle de Nueva York, por problemas con su automóvil, atraviesa el camino de un judío histérico, cuyos motivos desconocemos. El encuentro entre ambos propicia una asombrosa batalla automovilística, desplazándose a gran velocidad y teniendo un trágico desenlace. Si, algo ha salido mal. Szell tiene que abandonar su prudencia, abandonar su escondite y enfrentarse al mundo, del que no es ajeno.

Mientras que Henry “Doc” Levy sobrevive a un atentado en Europa, su hermano Thomas “Babe” Levy conoce a una hermosa mujer con la que intenta iniciar una relación. Ella, de nombre Elsa, mide el tiempo que Babe trata de mejorar para poder participar en un maratón, empresa en la que parece obsesionado. Babe no disfruta correr, no le tranquiliza, pero sella las memorias de su padre y de los juicios posteriores que se le hicieron a su muerte. Recorre el parque al lado de varios corredores más con un semblante molesto, furioso, egoísta. Desprecia a aquellos que lo hacen mejor que él. Ella le permite ser más relajado, menos discreto. Eventualmente, la violencia lo alcanza, primero en un parque al lado de Elsa, posteriormente al atravesar el camino de Szell.

Todo esto tiene como motor el movimiento de una gran cantidad de diamantes, trabajo que dejo inconcluso el hermano de Szell. De ahí se desprenden todas las conexiones con cada uno de los personajes que aparecen en la historia. Doc parece estar por encima de cualquier situación, adelante del peligro. Su reunión con Babe es breve. Doc comete un error, uno que todos cometemos, la soberbia. Szell es más que un anciano nazi en constante persecución, por debajo de esa imagen física noble, Szell es un psicópata que no se detiene hasta conseguir sus objetivos.

Convencido de que Doc conserva información crucial para completar su misión, el siguiente blanco es Babe, el hermano que ignora todo lo que esta sucediendo a su alrededor, su relación con Elsa, con Doc, con su pasado.

La confrontación se lleva a cabo en un cuarto. Babe atado a una silla, sin entender que le ha pasado, como ha llegado. El Dr. Christian Szell se presenta con una sola pregunta, una que conforme la repite se convierte en una amenaza terrible. Es ahí, en ese contacto inicial, en ese inmejorable momento, que Szell deja escapar una vez más a ese asesino que tanto daño le hizo a la humanidad.

Babe, sabemos, escapara. Pero su huída no será sin huellas, sin marcas. No solo las físicas. Babe parece decirnos que los habitantes del mundo se odian. Se odian cuando estorban una calle accidentalmente, se odian cuando corren uno al lado del otro y se odian cuando se presentan por primera vez, cuando las opciones que se brindan son dolor o placer.

El Dr. Christian Szell fue personificado por Laurence Olivier en la fabulosa cinta (que acabo de descubrir… mea culpa) “Maratón de la Muerte”

Olivier trabajo enfermo y bajo advertencias médicas hacia el productor de la cinta. Fue nominado a Mejor Actor Secundario en la entrega de los Premios Oscar por su interpretación del despiadado Dr. Szell. En los extras del DVD, Dustin Hoffman aclara aquella anécdota tan mencionada y mal citada. Hoffman dice que para prepararse para la escapatoria después de la brutal tortura, paso tres días sin dormir. Olivier le respondio: ¿Por qué no intentas actuar?. A lo que siguió la explicación de cómo Olivier arriesgaba su vida en cada función de Romeo y Julieta.

Marathon Man (1976)
Dir. John Schlesinger
Guión: William Goldman (basado en su novela) y Robert Towne
Actúan: Dustin Hoffman, Laurence Olivier, Roy Scheider, Marthe Keller, William Devane

10 comentarios:

Joel Meza dijo...

Uno de los villanos más escalofriantes del cine hollywoodense, sin duda, Sergio. La escena en el distrito de los diamantes es sobrecogedora. Y la tortura a Hoffman... qué Hostal ni qué nada.

adayin dijo...

Me acuerdo, Joel, que mi mama fue una de tantas películas que me platicaba (y que mi imaginación desarrollaba paso a paso) Y me decia que era horrible esa escena.

Como ves, la acabo de descubrir (que verguenza) y decía "uy, a ver si cierto" Y era cierto. Ni gráfica ni nada, pura maldad. Con cuanta paciencia y hasta cariño lo hace, es impactante. Y el Sr. Olivier... wow.... aun a pesar de que se le nota enfermo, es implacable su presencia...

Si, la escena de la calle de diamantes es espectacular, con su remate del "as" bajo la manga. Una maravilla me resulto ver/descubrir esta cinta

Joel Meza dijo...

Lo mismo a mí, he sabido de esta película desde niño (incluso mi mamá también me platicó la escena en el distrito de los diamantes, la desesperación de quien lo reconoce...), pero no la ví sino hasta hace un par de años. Incluso llegué a leer la sátira de MAD en su momento, pero no la película. Me hubiera orinado en el asiento del cine, estoy seguro.

Möbius el Crononauta dijo...

¡Terrorífico! Ahora ya no duermo...

Qué bueno era Olivier, por Dios

Josafat M. dijo...

Ah mira, ni en cuenta que existía esa peli, gracias por el tip.

adayin dijo...

Joel: creo que yo también.

Moebius: Buenisimo, como pocos en la historia. Y ese papel fue catalogado dentro de los 20 mejores villanos (¿?) del cine

Josafat: Por fin me toco una que no conocieras. Checala, te va a gustar

Joel Meza dijo...

Está bien la expresión, Sergio: mejores villanos. Peores villanos serían los que no pelan un chango a nalgadas: se me viene a la miente inmediatamente el diablo inútil que hace Elizabeth Hurley en el remake de Bedazzled.

adayin dijo...

¿Elizabeth Hurley era la villana? Mira, siempre crei que era Fraser

Josafat M. dijo...

Ya pronto veré esta, oye, viendo la foto, se parece un chorro a Robin Williams en One Hour Photo.

adayin dijo...

Si cierto, Josafat... con sus respectivas diferencias, verdad