Tha Power



Si uno volteaba a los charts norteamericanos a mediados de los años 90, el listado estaba inundado de hip-hop y rap. A muchos especialistas les parecía extraño que aún en su mercado más amplio, el rap siguiera atrayendo a la gente, por encima de los prefabricados músicos que empezaban a conquistar diferentes plazas. El género Rap, similar al Metal, ha sobrevivido incontables enfrentamientos y ha sabido perdurar mucho más tiempo que el que se había estimado. Ambos géneros (rap y metal) han querido ser ejecutados durante un largo periodo, argumentando el daño que le pueden causar a la juventud. Puesto que el rap nace en las calles, la propia juventud es la que siente sus líricas como más propias, más identificables. En el intento de aniquilarlo, el género musical ha estallado a rincones donde su simbolismo no es tan ejemplificado como en el país de las barras y las estrellas. No es extraño encontrarse con un sonido asombroso de lugares como España, Francia, Rusia y gran parte de América Latina.

Sin contar a Eminem (o a pesar de él) y algunas otras excepciones, el rap esta representado por gente de color, y casi en su exclusividad, seres enojados, malencarados, lujuriosos y con miles de mujeres a su disposición. La imagen no es exclusiva y tampoco refleja mucho el sentimiento de la música y el tópico merece un comentario mucho más extenso. Pero es la imagen generalizada que se tiene de ellos (como a los gorditos matudos y tatuados del metal)

Por eso cuando estoy en la sala de cine, esperando lo sobrenatural en una cinta como X-Files: I Want to Believe y aparece alguien como Xzibit como un durísimo e inexpresivo agente federal, no puedo contener una sonrisa medio cómplice, medio burlona. Lo primero que pensé al verlo fue “este va a pimpear una nave extraterrestre, le pondrá sus spoilers, sus alerones, sus rines, sus luces de neon y un componente para x-box, blue-ray y 14 sub-woffers en cuadrafónico”. Evidentemente, la presencia de algún rapero en alguna cinta, asegura que su escuadrón de fans estará presente… aunque sea por el equipo.

Xzibit no lo hace mal, aunque tampoco aporta mucho. La presencia de otros raperos tampoco ha sido excepcionalmente mediocre. Y aunque uno pueda argumentar porque su presencia empobrece una cinta, el fenómeno se seguirá dando un buen rato. Son, al final, personajes populares, amados u odiados que representan un estilo de vida fastuoso, cuyos orígenes son bastante humildes (en el mejor de los casos) Quizá los ejemplos de Will Smith o Jamie Foxx justifica la constante aparición de otros raperos que a pesar de no ser los más carismáticos, ejecutan el trabajo con decencia. Unos con más o menos suerte que los otros.

Ja Rule no es el rapero más famoso o popular de la zona, así como sus breves apariciones en The Fast and the Furious, Scary Movie 3 o Half Past Dead no le aseguran un lugar privilegiado en una cinta futura. Personalmente me sorprendió mucho el hecho de que Ludacris se la haya creído y apareciera en dos cintas bastante elogiadas por la crítica especializada: Hustle & Flow y la oscareada Crash, aunque también se le cuenta en 2 Fast 2 Furious. Por ahí también están los brevísimos cameos de Dr. Dre y Snoop Dog en Training Day. El propio Snoop Dog se le cuenta en cintas como Starsky & Hutch y el bodrio llamado Bones (donde era el estelar). LL Cool J es otro caso que aunque no sea el más talentoso, ha sabido sostener su presencia en cintas como Any Given Sunday, SWAT y Deep Blue Sea. ¿O que tal Busta Rhymes, golpeado, herido y torturado en Narc?

Pero hay dos casos que siempre me llamaron la atención, principalmente porque creía que eran actores, antes de ser raperos (aunque siempre puedo aludir a mi infancia y poca fuente de información, jaja)

Uno es el de Ice T, cuya biografía daría muy bien para un drama vivaz y agil. Lo vi en Ricochet, Trespass y New Jack City, y debo reconocerle bastante talento como actor y cantante.


El otro es indudablemente el hombre nacido como O’Shea Jackson, quien cambio su nombre de manera oficial a Ice Cube. El simpático gordito de Barbershop pertenecía al grupo de rap que quizás cimentó todo el movimiento que le siguió. Al lado de Dr. Dre y el fallecido Easy-E formaron la bandota N.W.A. la que grabo su nombre vía la poderosa canción “Fuck Tha Police”. Pero antes de saber todo eso, la primera vez que vi a Ice Cube fue en una de las mejores películas “del barrio” que se hicieron, alla por 1991: Boyz n the Hood. Siendo su debut como actor, en el enorme papel de Doughboy, Cube siempre fue para mi un actor y uno bastante bueno. Después conseguiría la popularidad en cine, como solista, como productor, como creador de tours (incluidos los Red Hot Chili Peppers) y demás actividades que lo colocan como un individuo bastante activo, carismático y admirado.

Finalmente no es tan malo que incluyan a músicos en el cine, aunque parezcan actividades radicalmente opuestas. Algunos resultados (como los mencionados) tienen agradables repercusiones. Ya Britney ha dejado de actuar y Mandy Moore de cantar. No todo esta perdido

8 comentarios:

@duendecallejero dijo...

Yo Sergei... Ice-T is the Man!

@duendecallejero dijo...

Mmmm... A tu encuesta sobre villanos de Batman le falta uno... Bane... Mi voto es para él.

Joel Meza dijo...

Afortunadamente para mí, desconozco todo del rap y el hippity-hop, así que cuando salen estos cantantes/raperos en películas, generalmente no los reconozco y su trabajo como actores es lo que me convence o no.
Ice T y LL Cool J siempre me hacen reir. Excepto cuando no.

adayin dijo...

Duende: Se... Ice T rules. Aunque el fulano cuando empezo de rapero, se dedicaba también a asaltar joyerias. Un accidente le hizo alejarse de eso y ahora nomas sale en series de TV. De la encuesta... pues si, tienes razon, faltaron varios. Bane es como el Doomsday de Superman, indestrutible, inmutable, una masa torpe pero violenta. A mi me gustaba mucho el que hablaba con un calcetín y su compinche (otro gorila destructor) que no recuerdo sus nombres.

Joel: Pero si los ubicas, aunque nos los conozcas, ¿no?. Siempre salen como ellos mismos, hartas joyas, harta actitud, hartas palabrotas y hartas mujeres

Joel Meza dijo...

Sergio, generalmente cuando sale un personaje así en una película, asumo que es un actor haciendo o parodiando a un rapero, hasta que mi esposa me informa que se trata de Fulano-T o M-Engano. Ella sigue jurando y perjurando que el jip-jop es la máxima aportación de los EUA a la música del s. XX.

Confa dijo...

Pues yo tampoco reconosco a muchos, pero lo que si es un hecho es que Eminem nunca en su vida debe de volver a actuar. Ice Cube como musico no me rifa en lo mas minimo, como actor gobierna.

elvis dijo...

Te dejaré otro comentario expresando mi enorme ignorancia sobre el hiphop/rap.
Es cierto que cuando aparecen en películas no suelo tener ni pajolera idea de quienes son, por lo general.
Aunque pensandolo bien hace muchísimo tiempo que no veo películas en las que me encuentre a estos tipillos (dicho sin ningun desprecio, ;) ) en el reparto...

escribes tantísimo en tu blog que apenas me da tiempo a leer absolutamente todas tus entradas!

gracias por la felicitación! ;)

saludos vespertinos!

adayin dijo...

Joel: Creo que tu esposa tiene algo de razón. El hip-hop es una gran aportación (no se si la mayor) de los EU y que han provocado su producción en varios rincones del mundo (con resultados muy decentes)

Confa: Jeje... A muchos les gustaría que ya dejara de cantar. A mi me entretuvo 8 mile, pero dudo mucho que vuelva a actuar en otra cinta.

Elvis: Que bueno es verte por aca de nuevo. Muchas gracias por los comentarios.