No era como me acordaba
The Running Man
Dir. Paul Michael Glaser, 1987
Hubiera querido suprimir varios recuerdos cuando me tope con la oportunidad de revisar esta cinta, después de más de 10 años de no hacerlo (o más). El recuerdo del cine tan espantoso en el que tuve que verla (se llamaba Cine Revolución), el frío que sentía al salir y la sensación de que mis papas no estaban nada contentos después de haberme llevado a verla (ante mi insoportable insistencia)
Hubiera querido hacerlo, porque al volver a ver la cinta The Running Man (1987), se elimino casi automáticamente cualquier otro recuerdo que de la misma tenía. El principal (el que me hace comentarlo) es reconocer que la cinta es una falladísima adaptación muy libre de un cuento corto de Stephen King, con el mismo título, cuyo único interés era servir como vehículo de lucimiento de Arnold Schwarzenegger. Mucha gente alude a la forma y la temática que King elaboraba cuando escribía bajo el seudónimo de Richard Bachman (con el que se publicó esta historia) Y es que, bajo el nombre de Bachman, el escritor desarrollo historias que rebasaban el horror y suspenso, mientras se aproximaba a temas que profetizaban un futuro destructivo, desolador, inhumano. Bajo esa sombra, King publico una de sus obras mayores, Rabia. Incluyo una historia asombrosa sobre un hombre que se negaba abandonar su hogar para que se pudiera construir una moderna autopista (en RoadWork), además de incluir dos historias cuyo común era la degradación del entretenimiento. La primera sobre varios jóvenes compitiendo por una vida sin preocupaciones económicas dentro de un maratón brutal, donde quien no resistía era ejecutado (el cuento The Long Walk). La segunda sobre un hombre desilusionado, endeudado y con una familia necesitada de medicamentos, que decide participar en uno de los programas de concursos del gobierno, cuyo motor es la victoria del sobreviviente dentro de una cacería.
Sobre esta última se basaba esta cinta del otrora popular Arnold, donde interpretaba a Ben Richards, un policía anti-motines en el año 2019, que en una misión se niega a asesinar a personas hambrientas, para ser culpado, incriminado y enviado a una prisión de condiciones inhumanas. Muy pronto escapa (sin despeinarse) para buscar a su hermano y escapar del país. Sin embargo es capturado (sin despeinarse tampoco) por un grupo comandado por un ambicioso e inescrupuloso conductor del programa de televisión más popular del momento, donde los concursantes (criminales e individuos que le estorban al gobierno) son cazados por varios personajes del tipo gladiadores del futuro. De tal suerte que Richards acabará como la atracción principal, al lado de dos compañeros de prisión y una mujer que se interpuso en su escapatoria.
En su momento, lo detonante (y emocionante) de la cinta provenía de las características y la operación de cada cazador-gladiador que se lanzaba en la búsqueda de los participantes. Cada personaje tenía motivos, fortalezas y atributos únicos. Richards ira eliminando a cada uno de los guerreros, para que poco a poco, capture la atención y favoritismo del público, uno que parece no saber de que trata dichoso concurso.
Las películas envejecen bien o mal. Ninguna se queda a medio camino y algunas afortunadas adquieren mayor vigencia conforme pasan los años (por ejemplo, Blade Runner) En el caso de The Running Man (El Sobreviviente, era el título en español a su estreno), el envejecimiento es tal, que cada secuencia es de un humor involuntario que no se había percibido en su momento (o al menos yo no lo percibí) ¿Es culpa de los tiempos actuales, del cine actual o de la inocencia ridícula de su propuesta? Los gladiadores-cazadores parecen tan débiles, tan inofensivos que las reacciones caricaturescas de Richards tienen cierta coherencia. Cada personaje peca de inocente, de absurdo y de obsoleto, como el programa mismo.
Hubiera querido hacerlo, porque al volver a ver la cinta The Running Man (1987), se elimino casi automáticamente cualquier otro recuerdo que de la misma tenía. El principal (el que me hace comentarlo) es reconocer que la cinta es una falladísima adaptación muy libre de un cuento corto de Stephen King, con el mismo título, cuyo único interés era servir como vehículo de lucimiento de Arnold Schwarzenegger. Mucha gente alude a la forma y la temática que King elaboraba cuando escribía bajo el seudónimo de Richard Bachman (con el que se publicó esta historia) Y es que, bajo el nombre de Bachman, el escritor desarrollo historias que rebasaban el horror y suspenso, mientras se aproximaba a temas que profetizaban un futuro destructivo, desolador, inhumano. Bajo esa sombra, King publico una de sus obras mayores, Rabia. Incluyo una historia asombrosa sobre un hombre que se negaba abandonar su hogar para que se pudiera construir una moderna autopista (en RoadWork), además de incluir dos historias cuyo común era la degradación del entretenimiento. La primera sobre varios jóvenes compitiendo por una vida sin preocupaciones económicas dentro de un maratón brutal, donde quien no resistía era ejecutado (el cuento The Long Walk). La segunda sobre un hombre desilusionado, endeudado y con una familia necesitada de medicamentos, que decide participar en uno de los programas de concursos del gobierno, cuyo motor es la victoria del sobreviviente dentro de una cacería.
Sobre esta última se basaba esta cinta del otrora popular Arnold, donde interpretaba a Ben Richards, un policía anti-motines en el año 2019, que en una misión se niega a asesinar a personas hambrientas, para ser culpado, incriminado y enviado a una prisión de condiciones inhumanas. Muy pronto escapa (sin despeinarse) para buscar a su hermano y escapar del país. Sin embargo es capturado (sin despeinarse tampoco) por un grupo comandado por un ambicioso e inescrupuloso conductor del programa de televisión más popular del momento, donde los concursantes (criminales e individuos que le estorban al gobierno) son cazados por varios personajes del tipo gladiadores del futuro. De tal suerte que Richards acabará como la atracción principal, al lado de dos compañeros de prisión y una mujer que se interpuso en su escapatoria.
En su momento, lo detonante (y emocionante) de la cinta provenía de las características y la operación de cada cazador-gladiador que se lanzaba en la búsqueda de los participantes. Cada personaje tenía motivos, fortalezas y atributos únicos. Richards ira eliminando a cada uno de los guerreros, para que poco a poco, capture la atención y favoritismo del público, uno que parece no saber de que trata dichoso concurso.
Las películas envejecen bien o mal. Ninguna se queda a medio camino y algunas afortunadas adquieren mayor vigencia conforme pasan los años (por ejemplo, Blade Runner) En el caso de The Running Man (El Sobreviviente, era el título en español a su estreno), el envejecimiento es tal, que cada secuencia es de un humor involuntario que no se había percibido en su momento (o al menos yo no lo percibí) ¿Es culpa de los tiempos actuales, del cine actual o de la inocencia ridícula de su propuesta? Los gladiadores-cazadores parecen tan débiles, tan inofensivos que las reacciones caricaturescas de Richards tienen cierta coherencia. Cada personaje peca de inocente, de absurdo y de obsoleto, como el programa mismo.
Pero la más deliberada debilidad de la cinta es el propio Arnold (por eso pregunto, ¿será que la postura del actual gobernador de California influye para repasar su carrera en el cine?). El Richards de la cinta perdió su más grande atributo, su vulnerabilidad, su impaciencia y su temor que al final le permitía actuar (y hasta asesinar sin voluntad) El personaje en la cinta es un soberbio, sobrado, intolerante sujeto, más cercano a su indestructible Terminator que a un solitario ex policía estimado como un asesino despiadado. Richards elimina a uno de esos indestructibles gorilas-cazadores para rematar con un dialogo torpe y absurdo (que supongo se quería cómico) que proviniendo de Arnold suena aún más molesto.
A pesar de eliminar casi toda la trama del cuento original (el concursante ganaba 100 dólares por hora con vida y tenía que sobrevivir un mes completo para ganar el premio de mil millones de dólares), lo más rescatable de la cinta es la naturaleza con la que el concurso era aceptado y la interacción que el publico tenía con el mismo. La emoción que la gente manifestaba por el show y la sed de muerte que anhelaban.
He de admitir que mucho del encanto que recordaba de la cinta (como de varias) se perdió en esta nueva revisión. Pero debo admitir que no pude dejar de verla, tal vez con la esperanza de que esos agradables recuerdos se manifestaran de nuevo.
A pesar de eliminar casi toda la trama del cuento original (el concursante ganaba 100 dólares por hora con vida y tenía que sobrevivir un mes completo para ganar el premio de mil millones de dólares), lo más rescatable de la cinta es la naturaleza con la que el concurso era aceptado y la interacción que el publico tenía con el mismo. La emoción que la gente manifestaba por el show y la sed de muerte que anhelaban.
He de admitir que mucho del encanto que recordaba de la cinta (como de varias) se perdió en esta nueva revisión. Pero debo admitir que no pude dejar de verla, tal vez con la esperanza de que esos agradables recuerdos se manifestaran de nuevo.
12 comentarios:
Gracias por ahorrarme el mal trago! También tenía un buen recuerdo de esta peli, que debo haber visto hace 15 años...
The running man y The long walk son mis Stephen King favoritos. La adaptación para esta peli tiene que haber sido pésima, porque creo que la novela aún tiene perfecta vigencia.
Pues será el sereno, pero a estas películas le debemos muchas cosas. Entre ellas, creo, que las películas de acción o como quiera que se le llamen, se dejaran de tomarse tan en serio.
Es más... Creo que eso es lo que sientes añejo: su, digamos, seriedad.
Y vaya que, no tomándose en serio, ganaron.
A mi me pasó algo muy similar al revisar esta cinta hace unos cuantos meses. Aquí en la Argentina se tituló "Carrera contra la muerte" y era una de mis cintas favoritas de los 80, aunque es cierto que viéndola ahora, el film pierde mucho de lo que era en esa época. Creo que un poco se debe a la flojísima postura actoral de Arnold y otro poco debido a una dirección que funcionó en esa época pero que creo que son de las que no soportan el paso del tiempo. Así y todo es una cinta que recuerdo con cariño y que como bien dices cada vez que la veo, siempre la sigo hasta el final. Así son las pelis de los 80, por lo menos para mi. Gran artículo, Saludos!
Faraway: No es tan mal trago, jeje... Revisala, tal vez no te suceda como a mi. Por ejemplo, vi otra favorita mia hace poco, Cobra con stallone, y esa me sigue gustando mucho. The Long Walk es una maravilla de historia. Ojala puedas leer Rage, que es mi favorita de King
Duende: Tu referencia tiene toda la razon, la película no se toma en lo absoluto en serio, desde la adaptación. Y siento que también por ahi radica su encanto y su debilida. Por supuesto que le debo muchisimo a este tipo de cintas de los 80... vamos, eran mis favoritas. Ya de grande algunas me dejaron de gustar tanto, otras me gustan mucho mas (como Robocop o The Fly)
Jorge: Esta era de las que me gustaba ver una y otra vez. Creo que mi favorita de Arnold siempre fue Predator. Y lo sigue siendo, la sigo viendo y me sigue gustando cada vez que la reviso
Por cierto, a propósito del título en Argentina que indica Jorge, este fin de semana ví los cortos de Death Race, con Joan Allen. No sabía que habían hecho un refrito de este churrito que me entretuvo bastante de niño con John Carradine (y ahora veo en la imdb.com que también sale Stallone... que antes de Rocky, claro que para nadie significaba nada: era una película con el chino de Kung Fu y punto).
Por lo menos en los cortos se ven escenas peligrosas bastante reales, aunque... Joan Allen... lo que es tener que pagar la renta, ¿no?
Yo tengo unos 10 años -quizás más- que no veo esta película pero no recuerdo que fuese tan mala, más bien la disfrute mucho en su momento.
Claro, ahora ya no somos tan inocentes.
Por cierto, sobre esas películas que envejecen mal... me paso hace unos meses con "Entrevista con el vampiro".
Definitivamente hay recuerdos que nunca deben ser tocados nuevamente.
Joel: Que lo niego, esa nueva versión de Death Race me hace ojitos y no voy a negarme a revisarla. Lo unico que sigue preocupando es que el director es Paul WS Anderson y ya desde ahi lleva el sello de la mediocridad. Y viendo esos cortos con un amigo, ambos nos preguntabamos "¿Como es que consiguieron a Joan Allen?"... Verdadero misterio.
Juniper: Yo también la disfrute enormemente en mi infacia. Ahora no tanto, pero segui un poco emocionado. No he podido revisar Entrevista con el Vampiro, pero confio en tu criterio de que ha envejecido mal... La dejare intacta
Entrevista con el vampiro... también la dejo intacta como el churro que fue y es. Malísima adaptación, ridiculeces mojigatas con los vampiros (la niña demasiado vieja, por ejemplo) y joterías inexistentes en la historia original e innecesarias para la película. Y una creación (no voy a decir actuación: Paxton me ha puesto a reflexionar sobre el asunto) aburridísima por parte de Brad Pitt.
Pos no es que yo alguna vez fuera fan de esa cinta, pero asi como churrote... no se, la verdad es que no me acuerdo mucho. No leí la novela original y no puedo juzgar que tan apegada sea su adaptación. Pero me acuerdo de la rola de los Rolling del final (que tocaba Guns 'n Roses)
No es que sea de mis preferidas de Chuache, aunque tb guardo de ella un grato recuerdo.
A veces no sólo influye el paso del tiempo en la propia cinta sino tb nuestra capacidad de análisis actual frente a la pasada.
Por ejemplo, ese cine de videolub que tanto nos hizo disfrutar antaño, hoy día lo considerariamos mediocre. O incluso cintas alabadas en su tiempo hoy día han perdido todo aliciente (quizás sea grave, pero a mí me ha pasado con Suspiria de Argento, que casi me duermo al volver a verla tras muchísimos años)
Otras cintas que en su día no apreciamos, hoy quizás nos parezcan películones (recuerdo que la primera vez que ví "12 monos" no la terminé, y la segunda vez me encantó de principio a fin)
Y ya que nombrais "Entrevista con el vampiro", debo decir que a mí siempre me pareció un pestiño de cuidado xD
Revisionaré "The Running Man" para tener un concepto más claro y reciente sobre ella.
Saludos ;)
Gracias por tu visita Pliskeen. Que bueno que mencionas esa de Suspiria, de la que me declaro muy fan.
En el caso de 12 monos, creo que la cinta gusta más con cada nueva revisión. Saludos
Publicar un comentario