¿Y tu te reúnes?

A ver, en serio, ¿cuántas reuniones de grupos que se habían separado les emociona? Estoy seguro que alguna de todas las que están dándose les resulta muy atrayente. Para esos efectos la nostalgia es fundamental, y evidentemente debieron sentir una fuerte atracción a las bandas antes de su separación.

Muchas de estas reuniones son justificadas con la llegada de un nuevo disco, el cual puede ser, entonces, muy engañoso. Un ejemplo: Guns ‘n Roses. Acompañados de su nuevo disco (el cuál aún no sale al mercado y lleva más de diez años en su gestión), se reunieron y tocaron hace poco en México. El término “reunieron” es más bien relativo, puesto que solo Axl Rose es el único miembro que sigue en la banda (Izzy no cuenta). Se han escapado a lo largo de esos 10 años, canciones del nuevo disco, que más que piezas completas, son demos de muy baja calidad. Si ese hecho es influyente, lo desconozco en este caso, pero estos nuevos demos son espantosos. Y no porque Guns suene tan anticuado o fuera de forma, sino porque las canciones son aburridas, sin sentido, sin un ritmo orientado a algo y muy olvidables. ¿O era que la expectativa fue muy alta? Yo era muy fan de Guns, fui a su show en 1993 (el peor de mi vida, por cierto) y aún ahora pongo sus canciones y meneo la cabeza a su ritmo, que en un momento de la historia, fue frenético. Aunque este no fue un regreso en forma, puesto que Guns nunca dejo de existir (según términos legales que le daban el control a Axl), si se trata de una reelaboración muy forzada y fuera de lugar. ¿Valió la pena? No lo se, no tuve la oportunidad de ir a ver su espectáculo, pero la gente al parecer salio feliz. El nuevo disco sigue en progreso, sin una fecha específica de lanzamiento, así que esperaremos a ver que fue lo que demoro tanto su salida y, particularmente, que los demos hayan sido mejorados o eliminados.

No necesito decir que todos los grupos que se reúnen ahora, habían jurado que jamás lo harían (Cerati dijo que ni por todo el dinero del mundo se reunía con Soda), que se odiaban tanto que no podían tocar juntos en el mismo cuarto y que era tiempo de reunir nuevas experiencias. Enumerar los grupos que se están reuniendo, es un poco tedioso, se puede encontrar con mayor facilidad en Google y muy probablemente se me olvidara alguno. Pero recuerdo algunos, entre ellos la reunión que tardo más tiempo en darse, la de The Police. Aunque Sting nunca fue gran favorito mío, debo reconocer que había labrado una carrera estable y sólida que le daba cierta razón cuando dejo a sus compañeros de la banda. Soy más fan de The Police que de Sting en solitario y a pesar de que esta reunión esta generando mucha audiencia, percibo que poco les durará el gusto de haberse reunido y a los fans nos pesará cada vez más la edad cuando un evento tan nostálgico se perciba como en realidad es, un evento innecesario. Los rumores indican que se vera también en México, a finales de año.

La enorme banda Rage Against the Machine esta haciendo lo propio también. Mientras que el vocalista, Zach de la Rocha, trabajo en su proyecto de solista, del cual no hubo rastro alguno, a pesar de que algunas canciones se escuchaban muy bien, el resto de la banda, formo (como los miembros de Guns ‘n Roses) un nuevo proyecto musical que tuvo mucho éxito en un inicio, pero cuya duración fue breve. Audioslave tuvo un gran primer disco, plagado de éxitos y con una canción memorable de nombre “Like a Stone”. Era un grupo con mucho talento y mucha experiencia que nunca pudo orientar su sonido como conjunto. Una canción sonaba a Soundgarden, otra a Rage y otra a nada. Audioslave entonces muestra que era un grupo sin orden ni destino y pronto, dos discos después, sufrió una combustión espontánea. Rage no viene con ningún disco, ni parece haber mucho proyecto (los miembros aún se notan muy distanciados), pero soltaron una gran excusa para reunirse. “El mundo actual necesita una banda como Rage”. Conocidos por estar muy involucrados en los aspectos políticos del mundo (de Bush a Marcos), la justificación suena terriblemente cierta; no hay en la actualidad un grupo que quiera y pueda mover conciencias como Zach y compañeros.

Ahora que las Spice Girls y Timbiriche también aspiran a juntarse y revivir viejas epocas, quisiera saber que sigue y con que más me van a asustar. Debí empezar con esta frase “a mi no me gustan esas reuniones, con la excepción de Led Zeppelin”, que siguen esparciéndose rumores de que ese sueño sea una realidad. Incluso se formo la reunión de Anthrax con su antiguo vocalista Joey Belladona. Me pregunto, que tenía de malo John Bush (anterior vocalista), la voz de Farinelli, la actitud de rock psicodélico, o que Belladona juntaría mayor cantidad de fans y por lo tanto más dinero.

Alguna reunión es significativa para todos. En mi caso, son dos y ambas han sido muy criticadas desde diferentes perspectivas. La primera, aquella que reúne a Zeta Bosio, Charly Alberti y a Gustavo Cerati. Eventos que me perdí, como el concierto de Blur en el Teatro Metropolitan y el concierto -despedida de Soda Stereo, son recuerdos dolorosos. Si sirve de justificación, mi situación económica era precaria en ese tiempo, aunque uno como fan, agota todos los recursos para cumplir su sueño de convivir con sus grupos favoritos. La oportunidad de ver a Blur es cada vez más lejana. Y parecía lo mismo con Soda. Cerati no lo dijo una vez, lo dijo hasta el cansancio, no hay reunión. No habrá. Bueno, se equivoco o le llegaron al precio, el cual no quiero ni imaginar, cuando sus boletos cuestan 1,500 morlacos. Y sin duda este es la más nostálgica de todas las reuniones. ¿En cuantas fiestas se escucha una canción de Soda? ¿en cuantos bares? ¿en cuantas bodas y quince años?. Ya nos sabemos la letra hasta el hartazgo, pero con unos tragos encima, las entonamos con singular alegría. Me gustaría pensar que no es el dinero lo que los junta de nuevo, que es un nuevo proyecto, que es una nueva aventura para la audiencia. No hay un nuevo disco y la reunión tiene fecha de inicio y fin. Serán unos pocos conciertos y ya. Pero sin duda genera mucha curiosidad. Los tres miembros han desarrollado carreras muy interesantes (el más percibido es Cerati) y verlos juntos en el mismo escenario, con la experiencia y conocimiento que han adquirido con el paso del tiempo, puede resultar muy interesante.

La otra ha sido todavía más criticada. Inicialmente, yo la critique también, y era muy escéptico. Tanto que la primera canción que promueven me resulto muy desagradable. Después la escuche, sin saber que era la misma (ni atención le había puesto la primera vez) y ahora soy fan. Esta reunión sí trae disco bajo el brazo, llamado “Zeitgeist”. La reunión de los Smashing Pumpkins. Muy similar a Guns, los Pumpkins solo incluyen a su mítico vocalista, Billy Corgan, y al baterista original, Jimmy Chamberlain. El caso aquí es que los proyectos individuales de ambos miembros originales, fueron un desastre, en aspectos de crítica, público y económico. El retomar un proyecto que abandonaron por razones creativas (y mucho odio de por medio) suena más a volver al ojo público que a una verdadera aspiración de crear algo nuevo e interesante. Y sin embargo (pido una disculpa por mi poca parcialidad) la nueva canción “Tarántula” se escucha increíble. Es un sencillo de sus mejores discos, se escucha que la continuidad no se ha perdido y por el contrario, ha evolucionado (en mi humilde opinión). Extrañaba la voz de Corgan y me lleva de la mano a una época muy nostálgica en mi vida (es la generación que me toco, al final). Que si la nueva bajista quería ser como Britney Spears, que si Corgan es un oportunista y pragmático, que si Chamberlain se droga más que nunca, son elementos que tendrán que combatir si aspiran a que su reunión se considere seria. Desconozco si habrá paseo por México (no lo dudaría con lo que cuestan los boletos acá) pero si esperaré con mucha emoción el nuevo disco.

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