Apocalypto
Si no mal recuerdo, la sala estaba saturada. No cabía una sola persona más, así que mi impuntualidad característica me obligo a tomar asiento en la segunda fila (en la primera todos iban acompañados y supongo que prefirieron la compañía a un mejor sitio) Desde ese momento ya estaba de mal humor y soportar a todos aquellos que a 15 minutos de iniciada la función sacan su celular (para apagarlo, silenciarlo o responder un mensaje) ayudo a que en el momento en que el grupo ridiculiza a uno de los cazadores (dándole de comer los genitales de la presa) ya me sentía muy incomodo, aburrido y arrepentido.
Pero no me duele nada confesar que la cinta de Mel Gibson, Apocalypto (2006) me atrapo poco después y salí más que satisfecho terminada la proyección. Desafortunadamente, fue toda la controversia que produjo después de su estreno lo que daba de que hablar. De pronto, todos eran expertos de la cultura Maya y con sus limitados conocimientos, salieron los más odiosos e infundados comentarios que despedían el 2006. Algunos espectadores, críticos y personas con algún medio de comunicación se convirtieron en historiadores legendarios de la cultura y por tal, despreciaban el producto de Gibson, quien de por sí venía de su ultra controversial (y sobrevalorada) reflexión religiosa / gore-fest llamada The Passion of the Christ (2005) Entre que algunos todavía le guardaban rencor por esa visión de las últimas horas de Cristo (y su descomunal éxito económico) y los que lo tildaron de pretencioso por narrar una nueva histórica aventura en un idioma que ni conocían, Apocalypto fue más infame que su anterior cinta (sin incluir su penoso incidente pasado de copas)
Revisándola de nuevo, ya sin la fiebre acusadora e inquisidora, debo decir que he disfrutado aún más la cinta que en su momento de estreno. De manera independiente a los comentarios posteriores (y no muy enfocados en la cinta) el momento que conserve de la película (siempre conservo uno, ya sea bueno o malo) fue el desenlace: el fugitivo desesperado por rescatar a su esposa tambalea todo el camino hasta la orilla de la playa, se desploma, cansado y herido, detrás de él los últimos perseguidores se detienen a pocos pasos de su objetivo. Los tres miran al horizonte, dubitativos, temerosos pero fascinadamente atraídos por la visión.
Por esa escena, la cinta fue vapuleada. Aún en la sala, el cuchicheo correspondiente se producía y yo me preguntaba si la historia lo contaba así. Pero debo reconocer que esa secuencia supo resolver todo el problema y la historia en general. No todos saben que esa secuencia, la llegada de los invasores (¿?), fue la que motivo la existencia de la cinta. Gibson tuvo esa imagen (el hombre desplomándose en la playa) seguido por la llegada de los conquistadores (¿? again), seguido por una sonora carcajada suya y de su guionista. Cual sería la sorpresa que el hecho no era tan descabellado. Aparentemente, por el año 1502, Colón efectuaba un cuarto viaje, cuando arribo a una zona maya. El viaje y el regreso fue desastroso para Colón (perdió 3 de los 4 barcos con los que llego) Aunque el hecho no es totalmente comprobable, muchos historiadores afirman que sucedió. Y aunque Gibson se haya emocionado con las lecturas de Diego de Landa, en realidad nadie puede asegurar poseer la verdad absoluta sobre como vivieron en su época (pero para más, los anacronismos y errores aca)
Pero algo más golpeaba el ego de muchos espectadores y tenía que ver con el entendimiento de cada uno. Según muchos, la visión de la cinta es una ofensiva descripción de sus conocimientos. Los mayas “eran” explotados como violentos y degenerados animales, todo el misticismo romántico, mitológico, profeta, tecnológico, arquitectónico y sobre todo cultural se eliminaba. ¿En serio se cree que no era una cultura violenta y sanguinaria? ¿No lo fueron todas las civilizaciones existentes? ¿Y porque al entenderlos como violentos, dejaban de ser civilizados? Finalmente, como seres humanos, compartían la búsqueda de poder, dominio y codicia. Los sacrificios, en la cinta, son mostrados del lado de las victimas, a diferencia de los textos donde son valorados desde el punto de vista de los victimarios (esas versiones donde los sacrificados iban danzando felices a su cruel destino)
Pero no me duele nada confesar que la cinta de Mel Gibson, Apocalypto (2006) me atrapo poco después y salí más que satisfecho terminada la proyección. Desafortunadamente, fue toda la controversia que produjo después de su estreno lo que daba de que hablar. De pronto, todos eran expertos de la cultura Maya y con sus limitados conocimientos, salieron los más odiosos e infundados comentarios que despedían el 2006. Algunos espectadores, críticos y personas con algún medio de comunicación se convirtieron en historiadores legendarios de la cultura y por tal, despreciaban el producto de Gibson, quien de por sí venía de su ultra controversial (y sobrevalorada) reflexión religiosa / gore-fest llamada The Passion of the Christ (2005) Entre que algunos todavía le guardaban rencor por esa visión de las últimas horas de Cristo (y su descomunal éxito económico) y los que lo tildaron de pretencioso por narrar una nueva histórica aventura en un idioma que ni conocían, Apocalypto fue más infame que su anterior cinta (sin incluir su penoso incidente pasado de copas)
Revisándola de nuevo, ya sin la fiebre acusadora e inquisidora, debo decir que he disfrutado aún más la cinta que en su momento de estreno. De manera independiente a los comentarios posteriores (y no muy enfocados en la cinta) el momento que conserve de la película (siempre conservo uno, ya sea bueno o malo) fue el desenlace: el fugitivo desesperado por rescatar a su esposa tambalea todo el camino hasta la orilla de la playa, se desploma, cansado y herido, detrás de él los últimos perseguidores se detienen a pocos pasos de su objetivo. Los tres miran al horizonte, dubitativos, temerosos pero fascinadamente atraídos por la visión.
Por esa escena, la cinta fue vapuleada. Aún en la sala, el cuchicheo correspondiente se producía y yo me preguntaba si la historia lo contaba así. Pero debo reconocer que esa secuencia supo resolver todo el problema y la historia en general. No todos saben que esa secuencia, la llegada de los invasores (¿?), fue la que motivo la existencia de la cinta. Gibson tuvo esa imagen (el hombre desplomándose en la playa) seguido por la llegada de los conquistadores (¿? again), seguido por una sonora carcajada suya y de su guionista. Cual sería la sorpresa que el hecho no era tan descabellado. Aparentemente, por el año 1502, Colón efectuaba un cuarto viaje, cuando arribo a una zona maya. El viaje y el regreso fue desastroso para Colón (perdió 3 de los 4 barcos con los que llego) Aunque el hecho no es totalmente comprobable, muchos historiadores afirman que sucedió. Y aunque Gibson se haya emocionado con las lecturas de Diego de Landa, en realidad nadie puede asegurar poseer la verdad absoluta sobre como vivieron en su época (pero para más, los anacronismos y errores aca)
Pero algo más golpeaba el ego de muchos espectadores y tenía que ver con el entendimiento de cada uno. Según muchos, la visión de la cinta es una ofensiva descripción de sus conocimientos. Los mayas “eran” explotados como violentos y degenerados animales, todo el misticismo romántico, mitológico, profeta, tecnológico, arquitectónico y sobre todo cultural se eliminaba. ¿En serio se cree que no era una cultura violenta y sanguinaria? ¿No lo fueron todas las civilizaciones existentes? ¿Y porque al entenderlos como violentos, dejaban de ser civilizados? Finalmente, como seres humanos, compartían la búsqueda de poder, dominio y codicia. Los sacrificios, en la cinta, son mostrados del lado de las victimas, a diferencia de los textos donde son valorados desde el punto de vista de los victimarios (esas versiones donde los sacrificados iban danzando felices a su cruel destino)
Sin embargo, nada de eso debería ser importante. No es un documento histórico ni una recreación fiel a los hechos. Es una película de acción, que se quiso situar en esa época y entorno. Y como cinta de aventuras, es un viaje emocionante que pocos quisieron ubicar como tal. El héroe es capturado, humillado y marcado por el enemigo. Escapa de forma espectacular y huye tras la terca persecución del líder (quien pierde a un hijo) Entra en su asombroso territorio y emplea cualquier técnica y armamento para ir eliminando a sus perseguidores y llegar por fin a su familia, no sin antes enfrentarse en un duelo con su Némesis, secuencia montada con mucha pericia (sonido, edición, intensidad) Si la primera revisión que tuve me alegro, esta segunda me emociono.
No cabe duda que el director le metió mucha pasión al proyecto y el resultado no podría ser más satisfactorio, como una pieza ficticia (no se claven) El cuidado que hay para cada vestuario (realizados a mano por miles de personas, bajo el cargo de una mexicana) que distinguía las clases sociales. Los tatuajes que eran un vínculo con varios dioses, la construcción del impresionante mercado (pintaban madera para que pareciera jade), los vistosos paisajes, las secuencias de persecución, la impresionante violencia física y demás aspectos son de alto nivel. Siendo honestos, si alguien como Michael Bay hubiera puesto su pezuña (digo, mano) en el proyecto, el estelar sería Josh Harnett, hubiera sido hablada en ingles, pirámides y escenarios CGI, pólvora envuelta en hojas produciendo explosiones a la menor provocación y demás sutilices típicas del seudo director.
Mel Gibson bailaba a la par de los pobladores. Seguirá bailando con las ganancias de su historia religiosa, pero sin duda ha avanzado muchísimo con narrador y contador de historias, aunque tenga que obligarse a situarlas tan cerca como se pueda de la realidad.
10 comentarios:
La voté como una de las mejores películas del año pasado. Me encanta. La vi una sola vez, todavía, pero ahora que me lo recordás voy a tener que reincidir rápidamente. Muy bueno tu texto. Suerte!
dale con Michael Bay!!!!
De acuerdo con tus comentarios Sergio. La he visto tres veces, y Apocalypto me sigue gustando como un buen filme de acción y aventuras, además de estar excelentemente producido.
Tantas quejas y críticas negativas en México, no hicieron más que hacerla más popular, y como yo dije en mi crítica en aquel momento: ¿Quién se acordaba de los mayas hasta el estreno de Apocalypto? ¡Nadie! Ni productores ni realizadores de cine! Y todos ellos querían sacrificar y sacarle el corazón a Mel Gibson por haber cometido algo parecido a un sacrilegio.
La violencia que ilustra el filme, era parte de la vida religiosa maya, y quien no esté de acuerdo, puede investigarlo en los libros de historia de México.
No puedo opinar ya que no la he visto, pero es posible que no se hubiera llevado tantos palos si el director no hubiera sido tito Mel.
Saludos
muy deacuerdo con cuanto que se trata de una película de acción, que más o menos puede tener algo que ver con la realidad, no lo sabremos nunca, que la Labor de Gibson es colosal y ninguno otro habria podido hacer un trabajo asi también estoy deacuerdo, pero no estoy deacuerdo en cuanto que está bien, esa película es amor a la violencia por amor a la violencia, muy inecesario. a mi no me gustó
Faraway: Y la votaste bien, segun yo. ¿Solo una vez? Yo termine de verla esta segunda y ya queria volverla a poner. Si no es mucho, ¿que lugar fue?
Ana: CLARO. Cada oportunidad que tenga mientras respire (jejeje)
Alex: Totalmente de acuerdo, quien se acordaba... naaadie. Pero ahi andan todos criticandola por sus incoherencias historicas... Creo que si fue muy popular a su estreno, después la olvidaron muy pronto.
Mobius: Por supuesto que peso mucho que la haya dirigido él. Como todas las cintas de Shyamalan pesan por el propio nombre del director. Ojala puedas revisarla, vale mucho la pena.
Cotu: Bueno, Gibson es un especialista en recrear la violencia (y más la fisica y brutal) Igual se le quedo desde Mad Max. Sin embargo no creo que ese sea el punto, creo que cuenta una historia solida e interesante que por la ubicación tenía que ser violenta. Creo que la saga Saw es más amor por amor a la violencia. Pero quiza este equivocado. Muchas gracias por tu visita y comentario. Saludos
Es chistoso cómo la mayoría de la gente te dice "yo voy al cine a divertirme, a escaparme de la realidad" y nomás les das la oportunidad se vuelven, como dices, eruditos en historia o en el tema en turno. Ahora resulta que todos quieren aprender en lugar de divertirse (mmmmh... no necesariamente son actividades mutuamente excluyentes...).
Esta película es muy disfrutable pero en algunas escenas (muy poquitas, no sé mucho de los mayas) sí tuve que dejar concientemente de lado algunos anacronismos. Y salí queriendo dar una buena correteada.
(Ah, por cierto, en octubre ví un corto español en un festival del rancho, donde sale una de las ¡mmmm! actrices de Apocalypto. Muy muy recomendable, estoy seguro que está en youtube.
Sergio, con tu permiso, copio mi breve reseña:
Máquina (Gabe Ibáñez, España 2006). La violación vengada. Siempre pensé que los procesadores de alimentos tenían algo de obscenos y violatorios. Protagonizada por Iazua Larios, que apareció ya en nuestras pantallas poniéndose una enchilada en Apocalypto, de Mel Gibson.
la de la "enchilada"? jajajajajaja
y si, otro "mmmmm"
lo busco ahorita mismo
A mi esta película me encantó. De lo mejorcico que se ha hecho en los últimos años.
Ah, no está en youtube. Debí decir "casi seguro". Usté disculpe.
Publicar un comentario